Este informe relata el operativo de detención, tortura y encarcelamiento del exiliado brasileño Jefferson Cardim de Alencar Osorio, su hijo y su sobrino en Buenos Aires el 11 de diciembre de 1970 a su llegada al puerto de Buenos Aires desde Colonia (Uruguay). El operativo fue coordinado y realizado entre los agregados militares de la embajada de Brasil en Buenos Aires y agentes de Coordinación Federal de la Policía Federal Argentina. Si bien el informe no está firmado, se sabe que el agregado militar era Nilo Caneppa da Silva.

En este informe, que se redactó originalmente en la Embajada de Brasil en Uruguay, se analiza la situación de los refugiados y exiliados brasileños en Uruguay, que se pueden encuadrar en tres categorías principales según el estado jurídico: los solicitantes de asilo político; los refugiados (políticos o no); y los residentes permanentes. Entre los exiliados políticos que recibieron asilo por parte del presidente de Uruguay se citan figuras importantes como João Goulart, Leonel Brizola y Jefferson Cardim. El informe dedica varios párrafos a Goulart y Brizola, detallando sus actividades y posibles viajes a Estados Unidos y Francia respecto a Goulart, y el confinamiento de Brizola en Atlántida. Por otra parte, los refugiados políticos son aquellas personas que entraron a Uruguay o de manera clandestina o con visa de turista. La frontera entre Brasil y Uruguay facilita el tránsito de persona y la posibilidad del asilo "territorial." Finalmente los residentes permanentes son aquellas personas que tienen derechos a solicitar la nacionalidad uruguaya según lo previsto por ley.

Este informe relata el operativo acontecido el 16 de junio de 1971 que resultó en la detención y posterior desaparición forzada del exiliado brasileño Edmur Péricles Camargo, quien fue retirado por agentes de la policía argentina durante una escala en el aeropuerto de Ezeiza del vuelo LAN en que viajaba desde Santiago a Montevideo. Un avión de la fuerza aérea brasileña (FAB) llegó a Buenos el 17 de junio y viajó al aeropuerto de Río (Galeão) llevando a Camargo escoltado por agentes brasileños. El informe no está firmado pero hay una estampilla donde se puede leer "Adido do Exército" y "Uruguai".

Este informe relata que el exiliado brasileño Edmur Péricles Camargo, apodado "Gauchão," viajó en el vuelo LAN N. 153 desde Santiago de Chile a Montevideo. Llevaba consigo tres cartas, una dirigida a un médico uruguayo que era un "correo" entre los exiliados brasileños en Uruguay y la organización Tupamaros. Edmur tenía instrucciones de no contactarse con Leonel Brizola y sus seguidores en Uruguay. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

Este informe relata que los exiliados brasileños en Chile están muy preocupados con la desaparición de Edmur Péricles Camargo y entregaron al Ministerio del Interior de Chile un documento que relata la trayectoria de Camargo y su viaje a Montevideo el 16 de junio de 1971 por razones de salud. Camargo iba a volver el 10 de julio pero no se ha comunicado con ninguno de sus compañeros, quienes recibieron información de que fue secuestrado por agentes de policías argentinos y brasileños y posteriormente entregado a las autoridades de Brasil. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

Este informe relata que Joaquim Pires Cerveira y otros exiliados brasileños en Chile consideran que al agregado aeronáutico en Buenos Aires es responsable por la desaparición de Edmur Camargo. Cerveira pudo obtener copias de los archivos de LAN Chile de los que constaría el descenso forzado de Camargo firmado por el comandante del avión en Ezeiza. Dicha información aclara las dudas respecto a dónde Camargo fue efectivamente detenido. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

Este informe relata que la agente del G-2 cubano Sofia Lafoz tenía una relación amorosa con el ex agregado naval de Brasil en Chile. Él le confió que, después de haber recibido información relativa al viaje de Edmur Camargo, la transmitió al agregado aeronáutico en Buenos Aires, quien iba a armar la operación de detención de Camargo. La noticia circuló rápidamente entre los exiliados brasileños. A pedido de Cerveira, Sofia obtuvo la información del vuelo en el que viajaba Camargo. Ella sería amiga de Camargo y también se infiltró en la Embajada brasileña a través del agregado naval. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

Este informe relata que un pariente de Brizola, de nombre João Calixto, viajó desde Porto Alegre a Montevideo por tres días para llevar un informe sobre la situación militar en Brasil. El ex gobernador de Rio Grande do Sul, estaría "inactivo" en este entonces según el informe por considerar que no se puede hacer nada en Brasil. Brizola se encuentra viviendo en su estancia en Durazno. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

El CIEX pide información respecto al ciudadano brasileño Sydney José Marques para verificar si es la misma persona que Sydney Marques, miembro de la dirección del Partido Comunista Brasileiro Revolucionário. Ruega, además, cualquier otro dato disponible sobre Sydney Marques para su mejor identificación. No está firmado y solo aparece una estampilla al fondo.

El documento consta de dos parte. En este informe, el delegado de la policía especializada en extranjeros de São Paulo Ferreira transmite al Director General de la Policía del DOPS, Lucio Vieria, una recibo otorgado por la policía argentina de la Comisaría de Iguazú al momento de recibir el 17 de mayo de 1973, cuatro ciudadanos argentinos, que vivían clandestinamente en Brasil. Los mismos fueron entregados por los policías brasileños y quedaron en la Comisaría en averiguación de sus antecedentes. Además del informe, se adjunta el recibo de la Comisaría de Iguazú. El informe está firmado por Homero Honorio Ferreira, delegado titular.

Este informe remite información sobre la estrecha colaboración en septiembre de 1973 entre el Ejército de Uruguay y el Ejército de Chile para hacer frente a la gran cantidad de uruguayos en Chile, muchos de los cuales se presumía que fueran Tupamaros. El informe señala que Uruguay tenía una pequeña plantilla de oficiales trabajando en el Cuartel General del Ejército de Chile en Santiago para revisar el estatus de todos los uruguayos en Chile.

Este informe relata que el consulado privado de Brasil en la ciudad argentina de Alvear tuvo conocimiento por información de las autoridades de la aduana del puerto de Itaqui (Brasil) que el 26 de agosto de 1974 entró al territorio brasileño por ese puerto el ciudadano argentino Alberto Rosales, viajando en un auto roja y acompañado por una mujer. Dicha persona está requerida en Argentina y tiene orden de prisión, según la información proporcionada por las autoridades de la aduana de Alvear. El documento no está firmado.

Este informe relata que la Policía Federal Argentina realizó un operativo en los hoteles de Buenos Aires para lograr la incautación de armamentos. En el Hotel Madrid, fueron detenidos dos ciudadanos brasileños, un boliviano y un uruguayo, todos exiliados políticos procedentes de Chile que habían llegado a través de la Embajada argentina. En el anexo a) se refiere a otros ciudadanos brasileños, específicamente al ex Mayor Joaquim Pires Cerveira y João Batista Rita, que habrían sido entregados a las autoridades brasileñas. En el anexo b) se publican noticias procedentes de Rio de Janeiro y se refiere a la preocupación de la Iglesia Brasileña respecto al destino de los asilados políticos, citando al ex Mayor Joaquim Cerveira. (Los anexos a y b no están incluidos). El documento no está firmado.

El documento consta de dos parte. La primera hoja, con membrete de la SNI/RJ, indica que se está transmitiendo un listado de personas subversivas requeridas por las autoridades de Uruguay a agencias de inteligencias militares de Brasil, como CENIMAR/RJ y CISA/RJ. La segunda hoja, firmada por el Jefe del Estado Mayor del Ejército de Uruguay, General Luis Queirolo, indica que se requiere la captura de las personas enumeradas en el listado a continuación por sus vínculos con organizaciones subversivas. La hoja contiene los nombres de seis personas, juntos con su fecha de nacimiento, su número de cédula de identidad y el último domicilio conocido. Se pide informar el Comando General del Ejército una vez que las personas hayan sido detenidas. El documento no está firmado.