José Agustín Potenza nació en Buenos Aires (Argentina) el 23 de abril de 1928. Era músico, ejecutaba el acordeón, el piano, la batería y el órgano. Fue desde muy joven militante peronista y tuvo una activa participación política y sindical desde la década del 50.
Durante un tiempo trabajó como bibliotecario en la biblioteca del Congreso de la Nación de su país, hasta que fue destituido por un decreto de la dictadura de Argentina en abril de 1976. Separado de su primera esposa con quién tuvo 4 hijos, estaba en pareja con Rafaela Giuliana Filipazzi Rossini. Raffaela era ciudadana italiana nacionalizada argentina, país al que llegó con apenas un año con su familia que huía del fascismo y de la Segunda Guerra Mundial.
Fue a partir del golpe de Estado y de su destitución que José y Rafaela buscaron irse de Argentina, estuvieron un tiempo en Uruguay, Paraguay y Brasil, retornando a instalarse en Montevideo a comienzos de 1977. El 26 de octubre de 1976, Potenza, Filipazzi y otros cinco ciudadanos extranjeros habían sido detenidos por la Policía de la Capital en Asunción y expulsados a la Argentina, según consta de documentación hallada en el Archivo del Terror de Paraguay.
El 27 de mayo de 1977 la pareja fue secuestrada del Hotel Hermitage ubicado en el barrio Pocitos de Montevideo en donde se hospedaban. El operativo de secuestro fue una coordinación entre represores uruguayos y paraguayos en el marco del Plan Cóndor. Fueron trasladados al Centro Clandestino de Detención y Tortura del Cuerpo de Fusileros Navales (FUSNA) ubicado en el Puerto de Montevideo. Durante 1977 los operativos de inteligencia del FUSNA estuvieron a cargo de Jorge Tróccoli, condenado por el juicio al Plan Cóndor de Italia y Juan Carlos Larcebeau, condenado por crímenes de lesa humanidad también en Uruguay.
José y Rafaela permanecieron en ese centro de detención hasta su traslado al Paraguay ocurrido el 8 de junio de ese año. Los represores uruguayos los entregaron a oficiales de la policía paraguaya que habían viajado a Montevideo especialmente para trasladarlos a Asunción en un vuelo comercial.
En Paraguay fueron llevados al Departamento de Investigaciones de la Policía donde funcionaba un centro clandestino de detención en el que permanecieron varios meses, al menos hasta diciembre de 1977. Desde su secuestro Rafaela pudo enviar algunas cartas a una amiga a través de un policía que actuó como correo, la última fue fechada en noviembre de 1977. Algunos documentos y testimonios ubican a José como posiblemente trasladado al Penal de Emboscada y a Rafaela al penal del "Buen Pastor".
En agosto de 2016 se informó de la identificación de restos óseos que habían sido hallados en 2013 en una fosa en el predio de la Agrupación Especializada de la Policía paraguaya, en Asunción. Esos restos eran los de José Potenza, de Rafaela Filipazzi y de dos militantes desaparecidos paraguayos, Miguel Ángel Soler y Cástulo Vera Báez, este último también secuestrado en Puerto Iguazú, Argentina, en el marco del Plan Cóndor.
La identificación fue posible ante el cotejo con el ADN brindado por los hijos de las víctimas a través del trabajo de la Dirección de Memoria Histórica y Reparación de la Dirección General de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia paraguayo y del Equipo Argentino de Antropología Forense.
El juicio al Plan Cóndor llevado adelante en Italia investiga este crimen desde el año 2019. El abogado italiano Andrea Speranzoni presentó nueva información que permitió la apertura de una nueva causa el 14 de julio del 2022.
En el marco del juicio al Plan Cóndor llevado adelante en Italia desde 1999, el abogado Andrea Speranzoni presentó en 2019 nueva información hallada en los archivos militares de Uruguay. Esto permitió la apertura de una nueva causa en los tribunales de Roma que investigan ahora los homicidios de José Potenza y de Rafaela Filipazzi en Paraguay, y el de Elena Quinteros en Uruguay.