La sede del Servicio de Información de Defensa (SID) fue un centro clandestino de detención y tortura que estuvo ubicado en calle Bulevar Artigas 1488, actual 1532, de Montevideo (Uruguay). El lugar era mencionado con distintos alias: “la mansión”, “la casona” o “la casa de Bulevar y Palmar”. 

El edificio es una construcción señorial con columnas de mármol blanco que se organiza en tres plantas y se ubica sobre una de las principales avenidas de la ciudad. Fue construida en el año 1924, siendo sus dueños originales dos familias de clase alta y, en 1970, la propiedad fue adquirida por el Ministerio de Defensa.

Luego del golpe de Estado del 27 de junio de 1973, el SID cobró un protagonismo central en las acciones de represión de la dictadura tanto a nivel nacional como en la participación clandestina en operaciones conjuntas con organismos similares durante el Plan Cóndor. 

Existen testimonios de personas que refieren haber sido sujetas a extorsiones, secuestros y torturas en la sede del SID en los años 1974 y 1975. Es en el año 1976 que se desarrolló, en el subsuelo de la casa, el funcionamiento regular del centro clandestino de detención y tortura.

En julio del año 1976 un grupo de militantes políticos uruguayos que vivían en Argentina fueron secuestrados en Buenos Aires, llevados en primer lugar al centro clandestino de detención y tortura de ese país Automotores Orletti para luego ser ingresados clandestinamente a Uruguay. Luego de permanecer durante algunas semanas en un centro clandestino de detención y tortura del barrio de Punta Gorda de Montevideo, fueron llevados al SID. Entre agosto y diciembre de 1976 permanecieron en ese lugar secuestradas unas 30 personas, la mayoría de ellas permanecieron en una misma celda colectiva. La coordinación entre los represores que operaron en el SID y el grupo de tareas que operó en Orletti fue permanente en ese períodos, siendo los sobrevivientes testigos de al menos una visita de oficiales argentinos a la casona.

Durante su cautiverio varias de las personas secuestradas notan la presencia en la planta principal de niños y de una mujer con un bebé que había nacido a principios del mes de noviembre. Esa información fue fundamental para identificar que allí también permaneció detenida María Claudia García Iruretagoyena, una joven argentina secuestrada embarazada con su esposo que había sido llevada primero a Orletti y luego trasladada a Uruguay. En la casona, María Claudia culminó su embarazo y compartió los primeros días de su hija, Macarena, para luego ser desaparecida. Macarena Gelmán, nieta del poeta argentino Juan Gelman, fue apropiada por un policía uruguayo y recuperó su identidad en el año 2000, mientras que su madre permanece desaparecida.

En ese centro clandestino también permanecieron durante semanas los hermanos Anatole de 4 años y Victoria Julien de 1 año y medio de edad, hijos de uruguayos que continúan desaparecidos desde su detención en Buenos Aires en septiembre de 1976. Los hermanos Julien fueron trasladados clandestinamente a Chile y abandonados en la plaza O’Higgins de Valparaíso en diciembre de 1976. En esa fecha el centro clandestino fue desmontado y los secuestrados sobrevivientes fueron trasladados a las cárceles de Libertad (los hombres) y Punta de Rieles (las mujeres). Uno de los secuestrados, el periodista Enrique Rodríguez Larreta Piera, fue liberado y logró viajar a Europa a denunciar en organismos internacionales la situación padecida. 

A fines de la década del 70, el  SID trasladó sus oficinas y su operativa a otra sede y el inmueble fue ocupado en 1980, por el Centro de Altos Estudios Nacionales (CALEN) también dependiente del Ministerio de Defensa.

En el año 2012, en cumplimiento de la sentencia de condena dictada en la causa Gelman vs. Uruguay por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, se colocó una placa recordando al lugar donde fue vista con vida por última vez María Claudia García y como homenaje a las demás víctimas que fueron secuestradas en ese lugar.

En diciembre de 2016 la casa pasó a ser sede de la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH). El 22 de diciembre de 2017, la INDDHH señalizó el frente del inmueble identificando publicamente su funcionamiento como centro clandestino de detención y tortura durante el terrorismo de Estado y el 27 de junio de 2018 se abrió al público una muestra museográfica que narra estos sucesos.

El 5 de julio de 2019, la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria declaró el inmueble como Sitio de Memoria de acuerdo a ley No. 19.641 aprobada en el año 2018.

Los hechos ocurridos en el marco del Plan Cóndor en esa casa fueron investigados en causas judiciales uruguayas y argentinas. La Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó en el año 2011 al Estado uruguayo en la sentencia “Gelman” a acciones simbólicas reparatorias y a remover las trabas que impiden u obstaculizan el avance judicial en causas por delitos de lesa humanidad.