Carlos Federico Cabezudo nació en Mercedes, Departamento de Soriano (Uruguay) el 27 de abril de 1948. Le gustaba jugar y competir en ajedrez, disciplina en la que fue campeón juvenil, llegando a representar a Uruguay en el Torneo Mundial de Ajedrez que se realizó en Israel en el año 1967. Era estudiante de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República y se desempeñó como profesor de matemáticas y de dibujo en el Instituto José María Campos I de Mercedes y en el Departamento de Rocha en la Universidad del Trabajo del Uruguay.
En su ciudad Mercedes se vinculó a la militancia en el gremio de docentes y en el Partido Comunista Revolucionario (PCR). En 1973 desde los meses previos al golpe de Estado se profundizó la represión contra este partido por lo que Carlos, como otros militantes, se exilió en Argentina. Integró allí la Mesa Permanente del Comité Central de la organización junto a otros dirigentes como Nebio Melo y Winston Mazzuchi.
En agosto de 1973 el Ejército uruguayo, en un documento interno, requería la captura de Carlos Cabezudo y de otras nueve personas.
En abril de 1977 nació en Argentina la hija de Carlos. En noviembre de ese mismo año, luego de la detención en el puerto de Colonia (Uruguay) de un ciudadano argentino dirigente del grupo Montonero, viajaron a Uruguay miembros de la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).
A partir del 21 de diciembre de 1977 oficiales del Cuerpo de Fusileros Navales (FUSNA) fueron a Argentina y, en ese período también se conoce por documentos desclasificados que aumentó la presencia en ese país de miembros del Servicio de Información y Defensa de Uruguay.
La madrugada del 30 de diciembre de 1977 un grupo de agentes vestidos de civil y fuertemente armados ingresaron violentamente al apartamento donde vivía en Buenos Aires, junto al matrimonio compuesto por Juvelino Carneiro y Carolina Barrientos.
A los tres los sacaron a golpes y el domicilio fue totalmente saqueado y cerrado dejando por unos días adentro una “ratonera”. Los vecinos del edificio ubicado en la zona de Parque Chacabuco que intentaron acercarse a ver qué ocurría fueron amenazados y obligados a encerrarse en sus casos. El secuestro se atribuye a la Policía Federal Argentina, Coordinación General.
Un documento fechado el 9 de enero de 1978 del Servicio de Información y Defensa, ubicado en los archivos desclasificados en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay y utilizado como prueba judicial, informaba que se había individualizado a los miembros del Comité Central del Partido Comunista Revolucionario, mencionándose expresamente a que Carlos Cabezudo se encontraría en Buenos Aires y que se requería su captura por pertenecer el PCR.
Carlos, Juvelino y Carolina fueron vistos en los centros clandestinos de detención y tortura COT 1 de Martínez y en “Pozo de Quilmes” y “Pozo de Banfield” en Argentina. Se presume que Carlos podría haber sido trasladado clandestinamente a Uruguay en febrero de 1978. Sobrevivientes indicaron que lo habrían identificado en el centro clandestino de detención conocido como “Base Roberto o La Tablada” en Montevideo, donde operaba el Organismo Coordinador de Operaciones Antisubversivas.
Su desaparición se investigó en la causa judicial de 2007 por la que se condenaron al dictador uruguayo Gregorio Álvarez y al capitán retirado Juan Carlos Larcebeau. También su situación fue abordada por el Juicio Cóndor (Italia) y fue condenado por su homicidio el capitán retirado Jorge Nestor Troccoli. Las circunstancias de su lugar de desaparición y si, efectivamente, esto ocurrió en Uruguay aún no ha podido ser determinado.